La oficina es un recinto de concentración que requiere paz y armonía para que nos permita realizar nuestras tareas diarias. Contar con un espacio limpio y ordenado brinda esa sensación de estabilidad que nos permite ser más productivos.
Teniendo en cuenta esto y también el tiempo que pasamos en este espacio y el tránsito de personas que recibimos a diario, es necesario establecer una rutina de limpieza que puede ser prestada por una empresa profesional o realizada por nosotros mismos.
Las empresas especializadas en limpieza como Listo y Limpio ofrecen un servicio profesional que se enfoca en cubrir cada detalle de la oficina para brindar una limpieza profunda al recinto.
¿Qué es lo que diferencia una limpieza profesional de una sencilla? Aquí te compartimos algunos aspectos que refuerzan las empresas para encontrar un acabado mejor en las oficinas.
Segmentar el proceso por bloques de oficinas:
Es probable que dentro de una oficina se encuentren otras oficinas, despachos o departamentos, incluso sala de juntas, etc.
Conocer esta infraestructura y limpiarlas de forma individual es la clave para agilizar el proceso y permitir que la compañía continúe su operación incluso durante la limpieza. Parte del profesionalismo es la lógica que se ofrece a la empresa para la logística de aseo.
La empresa Listo y Limpio siempre empieza por el lugar más usado de la oficina para dejarlo listo para los clientes y colaboradores y así ofrecer una mejor imagen a cada persona que visite las instalaciones de su empresa.

Quitar el polvo de lugares recónditos:
Aunque no lo parezca a las oficinas también llega el polvo y se va acumulando de manera sigilosa, por lo tanto es importante repasar todas las zonas de manera cotidiana para evitar hallar una nube de polvo con el tiempo.
¿Qué hace difícil este paso? La cantidad de estantes, vitrinas, mesas, escritorios y cajones que se encuentran en una oficina.
Lo mejor es comenzar por la parte de atrás de lugar y finalizar en la zona principal, con un paño seco o plumero repasa cada superficie y remueve el polvo de todos los rincones. En este punto es importante que se levanten los adornos, cuadernos, libros, equipos electrónicos para retirar el polvo de manera profesional.
Pulir e hidratar los muebles:
Una vez el polvo desaparezca es momento de hacer brillar el lugar, cuando los escritorios y mesas son de madera se aplica un hidratante de madera que mantenga la calidad del mueble.
En el caso de tener acabados de vidrio se utiliza un limpia vidrios para eliminar cualquier huella o mancha que aniquile la estética del lugar.
Aspira los sillones, sillas y alfombras:
Sí, el uso cotidiano de las sillas, los sillones y las alfombras es un complejo de suciedad, en estos lugares se acumula el polvo, migas, residuos de zapatos que quedan con las pisadas, etc.
Puede pasar desapercibido, pero la limpieza profesional se trata de eso, de repasar antes de que se note el sucio.
Por lo tanto, como método de higiene preventiva, se debe utilizar una aspiradora para eliminar los residuos de los sillones, sillas y alfombras. Incluso si las sillas o sillones son sintéticos o de cuero es necesario ofrecer un proceso de limpieza con un paño húmedo.
Higieniza los aparatos electrónicos:
No se pueden olvidar de los teclados, teléfonos, mouses y cualquier otro tipo de dispositivos tecnológicos que se usen con alta frecuencia. Hay que recordar que la mayor parte del día se utilizan estos aparatos, hacemos contacto con nuestras manos y dejamos residuos en ellos.
Es esencial higienizar estás zonas con alcohol o desinfectante, con un paño limpio se esparce el limpiador y cubrimos todas las partes propensas a contaminarse con el uso constante de los colaboradores.

El suelo:
Finalmente podemos hacernos cargo del suelo, barremos el polvo, las mijas, tierra, o cualquier otro elemento que pudiera aparecer para después ofrecer un acabado profesional con un trapeador.
Claro que cada tipo de piso se trata con un proceso diferente, por ejemplo el granito, marmol, porcelanato o madera requieren de químicos limpiadores específicos. En el caso del granito y el mármol puedes usar agua para trapear y luego una cera para pulir y sacar brillo.
En el caso del porcelanato o cerámica, puedes utilizar solo agua. Y para la madera es ideal comprar un hidratante para suelos de madera, son productos específicos que desinfectan y dejan un acabado brillante.
Ambienta con fragancias:
La mejor parte de limpiar es lograr que todo huela bien, utiliza ambientadores, limpiadores con fragancia, difusores o incluso velas aromáticas para otorgar a la oficina un olor personalizado.
Este paso a paso de limpieza profesional de oficina esta bastante completo para que logres mantener tu espacio limpio. Si necesitas ayuda con eso puedes contar con Listo y Limpio que siempre dejan el lugar más limpio de lo que te imaginas.